Las actividades que se llevan a cabo en las oficinas o despachos no presentan a priori riesgos tan graves como otros sectores agrícolas, industriales o de la construcción, pero existen riesgos específicos que hay que conocer.
El uso continuado de equipos informáticos, utilización de mobiliario y exposición a determinadas condiciones ambientales (iluminación, ruido, temperatura y humedad) puedes causar daños a los trabajadores.
Las consecuencias de los riesgos laborales en oficinas y despachos son muy variadas, desde trastornos musculoesqueléticos (dolor de espalda y cuello, por ejemplo), hasta fatiga visual, disconfort térmico, estrés, irritación de los ojos, desmotivación, etc.
En Preverlab estamos especializados en prevención de riesgos laborales en este tipo de entorno de trabajo. Consúltenos sin compromiso.