Empresas Saludables

¿Qué es una empresa saludable?

Una empresa saludable es la que se preocupa por sus trabajadores más allá de lo legalmente exigible y más allá de las paredes de la empresa, actuando en:

  • las condiciones de trabajo de la empresa,
  • los hábitos de vida de las personas, y
  • el entorno social

¿Para qué sirve?

Una empresa saludable protege y promueve la salud, seguridad y bienestar de las personas con un enfoque de ganar-ganar: cuanto mejor estén las personas dentro y fuera del trabajo, más competitiva y rentable es la empresa.

Porque está demostrado que cada euro que la empresa invierte ahorra hasta 6 veces más:

1 € invertido

AHORRA

2,5-4,8 € en absentismo

2,3-5,9 € en costes de enfermedad *Fuente ENWHP (Red Europea de Promoción de la Salud en el Trabajo)

Imagina ahora que alguien te dice:

“si me contratas por 30.000 € al año, te ahorraré como mínimo 69.000 euros, y con suerte hasta 177.000 €”.

¿Crees que puede ser una buena inversión?

¿Cómo se hace?

Primero hay que identificar qué podemos mejorar, luego planificamos las acciones que queremos realizar para logar los objetivos y finalmente evaluaremos la eficacia de las mismas para conocer cómo podemos mejorar aún más, iniciando a continuación un nuevo ciclo de mejoras planificadas.

Actuamos sobre 4  pilares: las condiciones físicas (1) y psicosociales (2) del entorno laboral, los hábitos de salud (3) de las personas y la participacíón de la empresa en la comunidad (4).

Cada uno de esos pilares se desarrolla en una serie de factores y en su conjunto atienden a la prevención de riesgos laborales tal como la definió la Organización Mundial de la Salud: no sólo la ausencia de enfermedad, sino el bienestar físico, mental y social.

Es decir, las empresas saludables conjugan las gestión de las exigencias legales en prevención de riesgos laborales con el modelo de mejora contínua (en que se basan las normas ISO de gestión de la calidad) y con la responsabilidad social corporativa (RSC).

Eso parece complicado, ¿está a mi alcance?

En realidad sí está a tu alcance, porque el 75% ya lo estás haciendo (o deberías) para cumplir con lo que te exige la ley en materia de prevención de riesgos laborales.

En general son las grandes empresas las que están apostando por ello (pues les proporciona directa e indirectamente rentabilidad) y por eso podría parecer complejo, pero su sencillez se corresponde con la sencillez de la empresa en que la decides ponerlo en marcha. Por eso las PYME pueden aprovechar esta gran ventaja. Y es fácil si sabes cómo.

¿Quién lo reconcoce y cuánto cuesta?

Si buscas un reconocimiento oficial hay básicamente dos opciones: el esquema certificable promovido por entidades de certificación (AENOR) y el esquema reconocible auspiciado por el Instituto Nacional de Seguridad Salud y Bienestar en el Trabajo (INSSBT).

El esquema certificable de AENOR. La idea es la misma que los sistemas de gestión de calidad, gestión ambiental o gestión de la seguridad y salud laboral (ISO 9001, 14001, 45001): una norma establece unos requistos a cumplir, que se auditan y certifican por una entidad de certificacion, previo pago de la tarifa correspondiente.

El esquema reconocible del INSSBT. Una vez superada una autoevaluación sobre la gestión del bienestar en la empresa, el Comité de Verificación analiza las respuestas a los cuestionarios y evidencias de cómo lo realizas y, en su caso, emiten un certificado de reconocimiento de buenas prácticas del programa o proyecto evaluado. Es gratuito.

Independientemente de la obtención del reconocimiento de buenas prácticas por el INSSBT, aunque como paso previo, puedes formar parte del listado de empresas adheridas a la PST (Promoción de la Salud en el Trabajo) y obtener el correspondiente diploma. Para ello sólo has de adherirte a la declaración de Luxemburgo, lo que supone el cumplimiento de la normativa de PRL (punto de partida).

Y además siempre tienes la alternativa de trabajar para tu propio beneficio sin buscar reconocimiento externo, emprendiendo las acciones que consideres útiles.

No quiero meterme en esos berenjenales, pero siento que tengo cosas que mejorar y me gustaría avanzar algo, ¿qué puedo hacer?

Pues depende de lo que necesitas.

Se puede avanzar mucho poniendo a disposición de las personas las oportunidades necesarias para mejorar. Normalmente son cosas sencillas y muy económicas e incluso sin coste.

Y normalmente tienen que ver cómo nos comunicamos y nos relacionamos las personas, con cómo nos alimentamos y con cómo nos ejercitamos.

Algunas preguntas que nos pueden ayudar a descubrir incidicios de que podemos mejorar son:

¿hay mal ambiente de trabajo o con frecuencia estamos de mal humor?

¿hay absentismo, presentismo, apatía?

¿Creo que los trabajadores no cooperan como deberían?

¿Los trabajadores se quejan de la empresa?

¿Las personas tienen hábitos poco saludables: consumo de sustancias nocivas, sedentarismo?

 

Y recuerda que puedes preguntarnos, en Preverlab, como expertos te ayudamos a identificar lo que puedes hacer y seguir avanzando.

 

 

Alberto Resino Graduado en Ingeniería

Gestión estratégica de PRL y RRHH

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